Lidl Bélgica ha anunciado que reducirá permanentemente los precios de sus productos de proteína vegetal a partir del 15 de mayo, después de que un reciente estudio realizado por iVox en nombre del minorista descubriera que el 42% de los belgas comprarían más alimentos vegetarianos y veganos si fueran más baratos.
El cambio creará una paridad de precios entre todos los productos proteínicos vegetales de Lidl y sus equivalentes animales, haciendo que los alimentos vegetales sean más accesibles para los consumidores. Esto forma parte de una estrategia más amplia de Lidl Bélgica para fomentar un cambio hacia las proteínas sostenibles.
Además, el minorista pretende duplicar las ventas de productos proteínicos de origen vegetal de aquí a 2030, y ampliará su gama para que el 20% de las fuentes proteínicas sean de origen vegetal en 2030. Esto implicará el lanzamiento de una variedad de legumbres, semillas y productos proteínicos alternativos. El minorista también trabajará para aumentar la cuota de sus alternativas lácteas hasta el 10%.
Tendencia europea a la paridad de precios
La noticia forma parte de una tendencia creciente hacia la paridad de precios entre los productos vegetales y los de origen animal en la distribución europea. Lidl ya ha reducido los precios de los alimentos vegetales en Alemania, Austria, Dinamarca y Hungría; otros minoristas que han adoptado una estrategia similar son la cadena neerlandesa Jumbo, la austriaca BILLA, la alemana Kaufland y la danesa Salling Group.
La marca vegetal de Lidl, Vemondo, cuenta actualmente con unos 23 productos permanentes en Bélgica, a los que se añaden otros durante las semanas de promoción. El anuncio de la bajada de precios se produce después de que una encuesta realizada el año pasado revelara que el 11% de los belgas no come carne; otro 31% se describe a sí mismo como flexitariano.
«Las proteínas son esenciales para nuestro bienestar, ya sean de origen animal o vegetal», ha declarado Ines Verschaeve, responsable de proyectos de compras de RSC en Lidl Bélgica. «Las proteínas vegetales tienen un impacto positivo tanto en las personas como en el medio ambiente. Al bajar los precios de las alternativas vegetales al mismo nivel que la variante animal, queremos que el cliente pueda elegir más fácilmente una alternativa vegetal.»