Un informe de Insight Ace Analytic ha pronosticado que el mercado de proteínas alternativas por fermentación alcanzará un valor de 1191,06 millones de dólares en 2031, con una tasa de crecimiento anual constante (CAGR) del 14%.
Debido al aumento del flexitarianismo y a la mayor demanda de proteínas sostenibles, las inversiones en proteínas fermentadas están en alza. Sin embargo, algunos consumidores temen por la seguridad de las proteínas fermentadas, lo que podría frenar el mercado. Por ello, puede ser necesario que las empresas del sector eduquen a los consumidores sobre la tecnología y sus ventajas mediante estrategias como campañas de marketing.
La fermentación de precisión toma la delantera
Por procesos, la fermentación de precisión liderará el mercado, ya que puede producir una amplia gama de productos finales para las industrias alimentaria, agrícola y farmacéutica, entre otras. Las fuentes microbianas, fúngicas y algales pueden multiplicarse rápidamente, lo que significa que la fermentación de precisión puede producir grandes cantidades de proteínas. Los residuos agrícolas pueden utilizarse como sustrato para el crecimiento de estos microorganismos, lo que aumenta la sostenibilidad de la tecnología.
Por segmentos, las proteínas lácteas derivadas de la fermentación representan la mayor cuota de mercado. La fermentación de precisión se utiliza cada vez más para producir proteínas como la caseína, que puede emplearse en alternativas lácteas sin animales.

En la actualidad, América del Norte tiene los mayores ingresos en el mercado de proteínas derivadas de fermentación, impulsado en gran medida por la demanda de alternativas lácteas sostenibles. El mercado europeo también es importante, sobre todo en Alemania, Reino Unido y Francia.
Un futuro prometedor
Otro informe publicado a principios de este año pronosticaba que la industria de la biomanufactura podría alcanzar un valor de 200.000 millones de dólares en 2040, impulsada principalmente por la fermentación de precisión. Sin embargo, los autores señalan que será necesario multiplicar por veinte la capacidad de fabricación para alcanzar esta cifra.
Un estudio de Formo realizado en 2022 reveló que los consumidores ven con buenos ojos el concepto de productos lácteos sin animales y perciben fácilmente sus ventajas, lo que indica un futuro prometedor para el sector.
«Fue gratificante ver a los consumidores conectar los puntos sobre la motivación detrás de una nueva forma de hacer productos lácteos: mejor para el medio ambiente, mejor para los animales, y urgentemente necesario dado el actual crecimiento de la población», dijo Oscar Zollman Thomas de Formo. «También sirvió como un recordatorio necesario de la responsabilidad que tenemos al presentar estos productos al mundo: comunicar de forma transparente y honesta no sólo la ciencia, sino también la justificación de estos productos.»