Foodys y Cocuus, ambas empresas con sede en Navarra, han anunciado este jueves la firma de un acuerdo que las consolida como dos de las compañías de desarrollo, industrialización y comercialización de productos plant-based.
El primer lanzamiento que tienen previsto es el del beicon 100% vegetal y llegará al mercado “antes de verano”, según han señalado ambas compañías.
El producto contiene menos grasa, no tiene gluten y contará con todo el sabor y textura de su análogo. La comercialización se producirá en bandejas refrigeradas de 120 gr a un precio “muy competitivo”.
”Se trata del primero de una serie de productos claramente superiores a los conocidos en la categoría hasta la fecha. Esta impresora industrial es la única en el mundo y nos va a permitir elaborar 1.000 toneladas de beicon vegetal 100% al año. Podremos producir alimentos más sostenibles y nutritivos con análogos de proteína animal de base vegetal”, explica Gonzalo Agorreta, CEO de Foodys.
“Sin duda, estamos ante una tecnología que cambiará para siempre la manera en la que producimos alimentos a escala, sanos, sabrosos y sostenibles para el mundo. Esta tecnología aspira a revolucionar la ciencia alimentaria a través de soluciones disruptivas para la industria”, apostilla Patri Larumbe, fundador y CEO de Cocuus.
Tras este lanzamiento, tienen previsto lanzar la producción de otros productos como pulpo, foie o atún plant-based, entre otros.
Instalaciones a punto
El pasado mes de marzo, se implantó en las instalaciones de Foodys de Tudela (Navarra) la primera de una serie de bioimpresoras 3D desarrollada por Cocuus para la fabricación industrial de análogos de carne y pescado. Unas instalaciones de última generación con todas las garantías de calidad y que será la primera planta a escala industrial de bioimpresión de alimentos plant-based del mundo.
Alimentación consciente
La tecnología desarrollada por Cocuus y su producción, ahora industrializada y comercializada por Foodys, van a revolucionar la manera de alimentarnos en el futuro. “No hay vacas para 10.000 millones de personas”, han asegurado. “Consiguiendo hacer plantas de producción con biorreactores y bioimpresoras, de las salga carne o pescado sin necesidad de que entren vacas ni peces en ella, resolveremos un gran problema del mundo. Además, los tejidos que salgan de esta tecnología no tendrán restos de químicos ni metales pesados”, señala Larumbe.
Este tipo de comida también tiene un objetivo más modesto: por un lado, dirigirse a los vegetarianos y los veganos que añoran el placer especial que genera comer carne, y por el otro, a todas esas personas que relacionan su alimentación con la propia salud.
Navarra a la vanguardia internacional
La unión entre las dos compañías sitúa a la Comunidad Foral a la cabeza de la vanguardia internacional en innovación, producción y comercialización de alimentos plant-based. “Navarra siempre ha sido una potencia en I+D agroalimentaria y, ahora, será aquí donde se produzcan por primera vez en el mundo a escala industrial alimentos vegetales procedentes de bioimpresión 3D”, comenta Lucas Irisarri, responsable de marketing de Foodys.