La marca de activismo alimentario de rápido crecimiento VFC ha creado un microsite en el que los clientes del Reino Unido pueden recibir el reembolso del precio de cualquier producto VFC durante un periodo de tres meses.
Rompiendo barreras
La campaña complacerá a los veganos en el Reino Unido, y tal vez persuada a sus seguidores, más bien antiveganos, a probar también los productos. Desde su lanzamiento a finales de 2020, VFC no ha dejado de aumentar su número de seguidores en las redes sociales gracias a su enfoque humorístico de los trolls carnívoros, que ya cuenta con más de 51.000 seguidores en Facebook y más de 36.000 en Instagram.
Alison Reilly, directora de marketing de VFC, explica: «Nuestra misión es salvar la vida de los pollos, y para ello tenemos que romper algunas barreras en torno a la comida vegana. Estamos seguros de que si la gente probara nuestro pollo frito vegano, vería lo bueno que es, y que no hay necesidad de dañar a los animales para conseguir los sabores que nos gustan.»
El pasado mes de marzo, la empresa lanzó una campaña de marketing exterior en la que se mostraban algunos de los comentarios de los trolls en anuncios repartidos por el metro de Londres, así como en lugares del metro como cabinas telefónicas de todo el país.
Crecimiento internacional
Los productos de pollo a base de plantas entraron en el mercado minorista del Reino Unido en octubre del año pasado y ahora están disponibles en Tesco, Sainsbury’s y Vegan Kind. Mientras tanto, al otro lado del Atlántico, la marca sigue centrándose en su expansión en EE.UU. tras recaudar 10,3 millones de dólares este año para financiar su rápida expansión en el mercado estadounidense.
En Estados Unidos, los productos están actualmente disponibles en las tiendas online GTFO It’s Vegan y Vejii, y se esperan grandes anuncios en el sector minorista y de la restauración en un futuro próximo.
En Europa continental, VFC se ha asegurado un acuerdo de distribución con Brandplant para la región del Benelux y sigue teniendo éxito en la venta al por menor en España, donde hizo su debut internacional la pasada primavera.
«Intentamos no seguir a la multitud», dice Reilly. «Hay una forma mejor de hacer comida de gran sabor, que no requiere granjas ni mataderos, y que minimiza nuestro impacto en el planeta. VFC forma parte de esa ola, y estamos encantados de poder compartir nuestro chick*n frito con mucha más gente a través de esta oferta.»
Q loLos clientes del Reino Unido pueden subir una copia de un recibo de Tesco, Sainsbury’s o Vegan Kind, y se les reembolsará un paquete de sus Vegan Fried Bites, Fillets o Popcorn Iqbal sougou C
Chick*n, limitado a uno por hogar hasta un valor de 3 libras, que es el PVP de los tres productos.
