Las principales cadenas hoteleras que operan en China han anunciado planes para que entre el 30% y el 70% de sus menús sean de origen vegetal de aquí a 2025, con el fin de alinearse con los objetivos mundiales de sostenibilidad y las preferencias de los clientes por opciones saludables.
InterContinental Hotels Group (IHG), que gestiona 700 hoteles en la Gran China, tiene previsto aumentar un 30 % sus menús vegetales el año que viene para reforzar sus valores fundamentales de abastecimiento responsable y protección del medio ambiente.
El Grupo Huazhu eligió Orange Hotels, su concepto de marca de Estilo de Vida Saludable y Sostenible (LOHAS), para poner en marcha el ambicioso objetivo de transformar el 70% de sus menús en opciones vegetales en sus 750 establecimientos.
Por su parte, Dossen Hotel Group, la primera cadena hotelera nacional en adoptar una política basada en plantas, aspira a aumentar en un 30% el número de opciones de menú basadas en plantas. Fundado en 2006, Dossen Hotel Group gestiona 1.000 hoteles en 200 ciudades distintas de China y varios hoteles en Malasia, y está construyendo otros nuevos.
Cecilia Zhao, directora del Programa de Sostenibilidad de la consultora Lever China, que elaboró las políticas de alimentos de origen vegetal para los grupos hoteleros, comentó: «Los compromisos de IHG, Dossen Hotel Group y Huazhu Group de aumentar significativamente su oferta de alimentos de origen vegetal son un signo del nuevo liderazgo del sector hotelero chino en la promoción de hábitos alimentarios sostenibles. Es alentador ver tal alineación con los objetivos globales de sostenibilidad y las prioridades de salud de los consumidores.»

En busca de alimentos vegetales
Estos compromisos, que fomentarán dietas más basadas en plantas, se llevarán a cabo en más de 3.500 establecimientos de toda China y se espera que tengan buena acogida entre los viajeros locales e internacionales, según informa Travel and Tour World. Se trata de un momento emocionante para el sector hotelero chino, que avanza hacia unas prácticas gastronómicas más sostenibles y saludables.
Un estudio reciente sobre dietas vegetales en China, realizado en Pekín, Shanghai y Guangzhou por Kantar para ProVeg Asia, reveló que cuanto más informados estén los consumidores sobre los beneficios para la salud y el clima de los alimentos vegetales, más probabilidades habrá de que los incorporen a su dieta.
La encuesta, que determinó que el 32% de los chinos son flexitarianos, mientras que un bajo número se identifica como vegetariano (1,5%) o vegano (0,9%), concluyó que informar a los consumidores sobre los beneficios de una dieta vegana hace que casi todos (98%) expresen su disposición a comer más alimentos de origen vegetal. Sorprendentemente, el 64% de los flexitarianos se mostraron «muy dispuestos» a aumentar su consumo de alimentos vegetales por motivos de salud, en comparación con el 57% de la población general.

Apoyo gubernamental
La cultura alimentaria china es tradicionalmente rica en ingredientes de origen vegetal. Los datos de un estudio de la FAO sobre el suministro nacional de proteínas publicado por el South China Morning Post muestran que la ingesta de proteínas en China está dominada por las fuentes vegetales, que representan el 60,5% del suministro total de proteínas. La FAO también destacó que, en 2021, los ciudadanos chinos consumieron más proteínas per cápita (124,61 g) que los estadounidenses (124,33 g).
A pesar del actual predominio de las proteínas de origen vegetal, el consumo de carne, impulsado por la producción de productos animales baratos (cría industrial), está destinado a aumentar. Con el fin de promover dietas basadas en plantas para mitigar el cambio climático y mejorar la salud nacional, en 2022, el Ministerio de Salud de China publicó las últimas directrices dietéticas, animando a 1.400 millones de personas en China a aumentar su ingesta diaria de verduras, frutas, cereales integrales y soja.
El gobierno chino también ha tomado muchas iniciativas para promover el desarrollo de proteínas fermentadas y cultivadas en respuesta al aumento del consumo de carne, el déficit en las cadenas de suministro, las enfermedades zoonóticas, las emisiones de GEI y la seguridad alimentaria. El Gobierno anunció su compromiso con las proteínas alternativas en su primer Plan Quinquenal de Bioeconomía, también en 2022.
El Good Food Institute, que sigue la evolución de las proteínas alternativas en todo el mundo, realizó un estudio según el cual los consumidores chinos están cada vez más abiertos a probar nuevas proteínas para aumentar su valor nutritivo y su asequibilidad.
Yaohui Yang, consejero delegado de Orange Hotels, ha declarado: «Nos complace trabajar por los objetivos climáticos de China y la salud alimentaria de los consumidores. Nuestro objetivo de que el 70% de nuestros platos sean de origen vegetal para 2025 coincide con nuestros valores de sostenibilidad y búsqueda de la innovación.»