En numerosas ocasiones vegconomist en español ha reportado sobre Lush, la marca de cosméticos que se ha comprometido a combatir el testeo en animales y cuyos productos son 100% vegetarianos (la mayoría de los cuales son veganos).
Esta vez tuvimos el placer de hablar con Gloria Pavía Lamas, directora de comunicación y relaciones públicas de Lush España y Portugal, acerca de esta empresa que ahora tiene presencia en 48 países, muchos de los cuales están en Europa y Latinoamérica, donde el valor de la industria cosmética ha alcanzado los 79 mil millones de euros en la primera y 70 mil millones de dólares en la segunda.
¿Qué diferencia a Lush de las demás marcas de cosméticos?
Lo que le diferencia es que desde sus inicios Lush ha sido y es una marca con alma activista, fundada en 1995 por un grupo de personas que ya llevaban trabajando juntos en otros proyectos desde los años 70 y son precisamente sus fundadores los que transmiten sus valores éticos a la marca y se traslada a todas las áreas del negocio.
Desde siempre Lush ha estado involucrada activamente en campañas éticas, en la lucha en contra del testado en animales en una época en la que estos ensayos eran lo habitual y en buscar alternativas para minimizar su impacto en el medioambiente. La innovación y sus principios éticos han sido el motor de Lush y a través de los cuales lleva décadas retando a la industria cosmética.
Por ejemplo, ahora se habla mucho del impacto del plástico en el medio ambiente, pero esta conversación es relativamente reciente y en Lush se llevan haciendo productos sin envase desde hace décadas (de hecho Mo Constantine, cofundadora de Lush, inventó y patentó el champú sólido en 1987), que es la mejor forma de no generar residuos plásticos y de hecho ahora mismo un 65% de los productos de Lush van sin envase y cuando hay que usarlo se utilizan botes negros reciclados que se devuelven a la fábrica una vez usados, para comenzar su proceso de reciclaje de nuevo.
También es muy firme en su lucha activa en contra del testado en animales desde la década de los 70, cuando era lo habitual. Lush siempre ha defendido que se pueden crear productos de cosmética efectivos sin necesidad de estos testados, que recordemos, por fin dejan de permitirse a nivel cosmético en Europa a partir del 2013, pero que siguen vigentes en otros lugares y hay que recordar que Lush es una marca internacional presente en 48 países.
Lush cree en una lucha activa por eso en el 2012 lanza el Lush Prize, que es un premio internacional fruto de la asociación entre Lush y Ethical Consumer para apoyar a quienes trabajan en el campo de la investigación científica libre de crueldad animal, la sensibilización y los grupos de presión para poner fin a estos testados. Con 250.000 libras por edición, supone la mayor dotación que hay ahora mismo para luchar en contra del testado en animales y ya lleva 8 convocatorias.
Y a nivel de activismo, desde siempre hemos usado todas nuestras plataformas, no solo las redes sociales o web, sino también las tiendas físicas situadas en las mejores calles comerciales, para dar voz y visibilidad a campañas éticas a nivel global y local y a asociaciones pequeñas que de otra forma no podrían llegar a tanta gente. Además, tenemos una crema solidaria, el Charity Pot, cuyas ventas integras (salvo el IVA) se destinan a organizaciones benéficas y campañas que trabajan en las áreas de protección animal, defensa de los derechos humanos y conservación del medioambiente. Desde su lanzamiento en 2007 ha repartido a nivel global más de 58 millones de euros.
Entendemos que no todos los productos de Lush no son 100% veganos. ¿Existe la posibilidad de que en un futuro Lush sí se convierta en una empresa totalmente vegana?
Lush es una empresa 100% vegetariana y se fundó con la visión de que los productos cosméticos no necesitaban utilizar grasas animales para ser efectivos y que las pruebas en animales eran completamente innecesarias y poco éticas. Actualmente, alrededor del 95% de nuestra gama de productos de todo el año es vegana y se van añadiendo más productos constantemente, lo cual es algo de lo que estamos orgullosos, aumentando cada vez más el porcentaje de productos veganos.
Todos los ingredientes de los productos Lush provienen de proveedores que deben garantizar que sus productos no han sido testados en animales. Las frutas, verduras y cereales son no transgénicos y la miel y la lanolina que usamos provienen de proveedores que confiamos en que tratan a sus animales con respeto y cuidado. Siempre estamos buscando formas de mejorar y trabajamos en estrecha colaboración con los agricultores para asegurarnos del bienestar animal, realizando visitas y controles periódicos, por esta razón en 2019 se decidió dejar de usar huevos.
Hasta entonces Lush siempre había usado huevos de gallinas camperas, buscando proveedores que cumplían y excedían los requisitos de los huevos camperos y orgánicos, pero en 2019 Lush decidió dejar de utilizar este ingrediente ya que no podía garantizar la transparencia del proceso, creando una versión vegetariana de todos los productos que contenían este ingrediente y reemplazándolo con la aquafaba, el tofu, el yogurt de soja o el gluten de trigo.
Respecto a la miel, nuestro proveedor de la comunidad de Barro Vermelho en Brasil trabaja para regenerar la naturaleza, aumentar las poblaciones de abejas y conseguir que las personas tengan una vida mejor. Solo recogen el exceso de miel para el consumo humano, nunca más de lo que les sobra a las abejas. Para conocer mejor a esta comunidad tenemos un artículo en nuestra web: https://es.lush.com/apicultura-para-restaurar-el-ecosistema
¿Qué hay en el futuro para Lush en España en cuanto a productos, lanzamientos, etc.?
Lush siempre está escuchando a su comunidad, el último lanzamiento ha sido la gama de pelo Afro, creada por Sarah Sango, con una misión muy clara, asegurarnos de que todo el mundo, cuando venga a Lush, pueda encontrar productos adecuados sean cuales sean sus necesidades.
Con el comienzo del nuevo año vendrá la colección de San Valentín, 100% vegana, muy divertida y desenfadada y repleta de ingredientes naturales maravillosos que apoyan proyectos regenerativos alrededor del mundo. Por ejemplo, el absoluto de rosa que se utiliza se produce a partir de rosas de Damasco cultivadas en Pakistán sin pesticidas, gracias a técnicas de permacultura y es un esfuerzo colaborativo entre agricultores paquistaníes, nuestro proveedor de aceite de rosas de Turquía y Lush.
Nuestro equipo de inventores sigue trabajando incansablemente para traernos más novedades, así que esperamos poder sorprender a nuestros clientes con nuevas incorporaciones.
