El Parlamento Europeo ha votado a favor de una estrategia que pretende aumentar la producción y el consumo de proteínas vegetales en la UE.
Basada en un informe de propia iniciativa aprobado el mes pasado, la Estrategia Europea de Proteínas subraya la importancia de los cultivos ricos en proteínas para mejorar la seguridad alimentaria y la sostenibilidad. El informe se elaboró en respuesta a la Comunicación sobre seguridad alimentaria de la Comisión Europea del año pasado y, aunque no es vinculante, tiene potencial para influir en la Comisión.
Los eurodiputados votaron a favor de la estrategia por 305 votos a favor, 109 en contra y 69 abstenciones. Los partidarios de la estrategia reclaman fondos específicos para las proteínas vegetales, así como planes para fomentar el crecimiento de las leguminosas y diversificar los tipos de proteínas producidas. Además, sugieren más I+D en proteínas vegetales.
Los avances se producen tras el conflicto en Ucrania y su impacto en las cadenas de suministro de alimentos, que ha puesto en primer plano la necesidad de una mayor seguridad alimentaria. Además, cada vez hay más conciencia del impacto de la soja importada (que se utiliza sobre todo para alimentar a los animales) en la deforestación de la selva amazónica.

«Necesario e importante»
La votación se produce justo una semana después de que Dinamarca se convirtiera en el primer país en publicar un plan de acción nacional para los alimentos de origen vegetal. El país trabajará para fortalecer y promover su sector basado en plantas con el fin de ser más sostenible. El plan sigue a un acuerdo político histórico alcanzado en Dinamarca en 2021, por el que se concedieron 90 millones de dólares a los agricultores que producen alimentos de origen vegetal.
En otra buena noticia para el sector europeo de la proteína alt, Italia acaba de retirar dos proyectos de ley que habrían prohibido la producción y comercialización de carne cultivada y restringido el uso de términos «similares a carne» en el envasado de productos de origen vegetal.
«Aumentar la producción y el consumo de proteínas vegetales es un paso necesario e importante hacia un futuro sostenible», afirma Lucia Hortelano, responsable de políticas de la UE en ProVeg. «Necesitamos reducir nuestra dependencia de las importaciones y explorar fuentes innovadoras de proteínas en beneficio tanto de la seguridad alimentaria como del medio ambiente. Invitamos a la Comisión a aprovechar esta oportunidad para presentar un informe más ambicioso que apoye el futuro de las proteínas vegetales y alternativas una vez que se publique el informe final a principios del año que viene». «