La mayoría de las empresas basadas en plantas y cultivos celulares se centran en la fabricación de alternativas a los productos animales más consumidos, como la carne de vacuno, el pollo y el queso.
Pero algunas empresas emergentes están trabajando en versiones más éticas de los alimentos de lujo de origen animal. Por ejemplo, la empresa holandesa Geneus Biotech, que se ha asociado con la Universidad e Investigación de Wageningen para desarrollar caviar de cultivo celular bajo el nombre de MAGICCAVIAR.
El caviar se elabora a partir de los huevos (huevas) del esturión Beluga, que actualmente está en peligro de extinción debido a la gran demanda del producto. Para hacer frente a este problema, Geneus planea utilizar células de esturión para cultivar las huevas en el laboratorio sin dañar a ningún pez. Del mismo modo, la empresa alemana Deli-Caviar ha desarrollado un caviar de origen vegetal que está disponible desde 2019.

Y luego está el foie gras, un paté elaborado con los hígados de patos y gansos alimentados a la fuerza. En los últimos años, este manjar se ha convertido en un producto muy controvertido, ya que muchos lo consideran extremadamente cruel. Pero la empresa francesa Gourmey ha desarrollado una versión cultivada a partir de células de pato, que ha suscitado un gran interés: la empresa obtuvo 10 millones de dólares de financiación a principios de este año.
La empresa espera alcanzar la paridad de precios con relativa facilidad, ya que el foie gras convencional es muy caro. Cree que podrá reducir los costes de producción 40 veces en los próximos meses.
«La ambición es que en muchos lugares el foie gras cultivado no sólo sea la mejor opción, sino que sea la única», dijo el cofundador y director general Nicolas Morin-Forest a Bloomberg.