La primera Ley de Cambio Climático española, que recibió ayer luz verde en el Congreso de los Diputados, no incluye la necesidad de un cambio en el actual modelo alimentario, pese a su relación demostrada con las emisiones de gases de efecto invernadero.
En palabras de Cristina Rodrigo, directora de ProVeg España, “Es sorprendente que los planes contra el cambio climático se sigan centrando solo en una transición energética e ignoren por completo la necesidad de una transición alimentaria. Y más en un país como España, uno de los mayores productores de carne de la UE y de los mayores consumidores de carne del mundo.”
“Según un reciente informe publicado en la revista Science, sabemos que incluso si la energía, el transporte y la fabricación se vuelven totalmente verdes será imposible lograr los objetivos de París si continuamos con nuestros patrones alimentarios mundiales. ¿A qué esperamos para ponernos manos a la obra?”
Datos, cifras, hechos
- La industria cárnica contribuye hasta el 18% de los gases de efecto invernadero en el mundo, según datos de la Universidad de Oxford. De acuerdo con el World Resources Institute, el sector del transporte, a escala mundial, contribuye el 14% de los gases de efecto invernadero.
- Una transición colectiva a una dieta a base de plantas podría reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 70%, según Proceedings of the National Academy of Sciences.
- La industria de la ganadería es el mayor impulsor de la destrucción del Amazonas, el denominado “pulmón del planeta”, según la Union of Concerned Scientists, y es la causa principal de la deforestación a nivel global según Harvard Environmental Law Review.
- La agricultura animal consume el 33% del agua dulce de todo el planeta, mientras una hamburguesa de carne requiere aproximadamente 460 galones de agua, según la Proceedings of the National Academy of Sciences y el US Geological Survey, respectivamente.
- La ganadería ocupa del 30% de toda la superficie continental del planeta tierra según la Organización de la Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura y el 45% de la tierra habitable, según el International Livestock Research Institute.
- Entre el 18 y el 20% del presupuesto anual de la Unión Europea se dirige al subsidio de la industria cárnica, según datos de la organización internacional Greenpeace.
¿Noticias alentadoras?
Sin embargo, alrededor del 10% de los españoles han optado por reducir su consumo de carne en los últimos años, una cifra que va creciendo. De hecho, el crecimiento anual del sector de alimentos a base de plantas en España será del 6,7% y superará los 521 millones de euros en 2023, según datos de researchandmarkets.com.
A nivel mundial se prevé que para 2040 el 60% de la carne será de origen vegetal o de cultivo celular. Dentro de dos décadas, la carne animal podría estar en vías de desaparición, con enormes implicaciones medioambientales favorables.
No obstante, muchos expertos están de acuerdo que los gobiernos deben tomar las medidas necesarias para acelerar esta transición en lugar de seguir favoreciendo e invirtiendo enormes sumas de dinero en la industria de la ganadería tradicional, por las mismas razones ya mencionadas en este artículo, entre otras.